Cuando somos niños nuestra imaginación se potencia a niveles sorprendentes, soñamos con ser superhéroes o nos divertimos recreando sucesos fantásticos en los que la felicidad se esconde detrás de un arcoíris que aparece de repente en el cielo. Al jugar los niños se cuentan entre sí distintas historias, también suelen disfrutar de oír narraciones divertidas que los entretengan antes de la hora del sueño, pero muy pocas veces es usual verlos sentados junto a un libro con el mismo entusiasmo. Los libros son vehículos para la imaginación, pero también pueden ser compañía perfecta para un sin fin juegos, por eso hoy en Mejora tu vida hablaremos sobre la importancia de la lectura en los niños y cómo podemos fomentar este acto por medio de una serie de tips super divertidos que puedes poner en práctica junto a los más pequeños, ¡no te pierdas esta nota! 

Leer es una de las actividades más enriquecedoras que nos acompaña en todos los aspectos de nuestra vida, a través de este acto aprendemos cosas nuevas del mundo, descubrimos historias memorables que nos llevan a vivir otras vidas y podemos desarrollar un sentido crítico y analítico que no podríamos fortalecer de otro modo, es por esto que es tan importante la lectura en niños que recién están comenzando a comprender aspectos básicos de la vida y que necesitan afianzar sus niveles de aprendizaje para poder crecer con mejores cualidades cognitivas. 

Si eres de los padres que a diario se preguntan cómo puedo educar a mi hijo con el hábito de la lectura, queremos darte un par de consejos que pueden facilitarte esta tarea y hacer de esta actividad todo un juego que tu hijo va a poder disfrutar mientras aprende cosas nuevas en el proceso.

Los libros deben ser sinónimo de libertad

Los niños suelen ser más felices cuando pueden expresarse libremente y hacer pequeñas elecciones entre lo que prefieren y lo que no. Aunque la mayoría de las decisiones que suelen tomar los más pequeños son más instintivas que racionales, ten en cuenta sus preferencias a la hora de adquirir un libro que te gustaría que él leyera, esto le permitirá adquirir cierto agrado por el objeto de lectura y facilitará que él se siente a leerlo con un cierta curiosidad de por medio. Acompáñalo en este proceso explicándole cosas que no entienda y léele en voz alta para que él se sienta más a gusto. 

Si ves que en el proceso el niño deja de lado el libro y se concentra en realizar otras cosas, no lo obligues a completar la lectura ni lo castigues por no estar disfrutando de lo que está haciendo, esto solo le generará un malestar que se convertirá en un impedimento a la hora de acercarse a otro libro más adelante. Busca hablar con él y pregúntale las razones por las que no le ha gustado el libro, sé comprensivo con sus gustos e intenta darle un tiempo para que pueda volver a retomarlo por su cuenta. Si esto no funciona siempre podrán ir a la librería y buscar un libro diferente que pueda producirle mayor felicidad. Para los más pequeños se recomiendan libros álbum o libros interactivos que tengan formatos llamativos y coloridos con los que puedan experimentar a su antojo, a medida que vayan creciendo puedes llevarlos por el mundo de los cuentos ilustrados y luego ayudarlos a encontrar historias más largas que puedan leer con mayor libertad.

Busca que la lectura se convierta en todo un juego

Aunque actualmente existen libros de todos los tamaños, colores, formas y formatos que facilitan que los niños se acerquen a ellos y adquieran el hábito de la lectura, la forma en la que se les enseña a leer y todos los procesos que se realizan junto al libro son una parte fundamental a la hora de fomentar esta actividad. Usualmente, los niños suelen conocer los libros en las escuelas, pero la forma en la que adquieren sus primeras experiencias de lectura está mediada por tareas u obligaciones monótonas que no los motiva a buscar otros espacios para leer un libro y disfrutar dejando volar su imaginación. 

La educación en niños ha cambiado y cada vez está más relacionada con el juego que con los trabajos abrumadores que coartan la alegría y el pensamiento libre de los más pequeños, es por eso que desde casa puedes seguir fortaleciendo su desarrollo planeando distintas actividades lúdicas que le ayuden a tu hijo a divertirse mientras lee; puedes acompañarlo a dibujar el personaje de alguno de sus libros o montar una pequeña obra de teatro inspirada en su historia favorita, esto incentivará el amor por la lectura y le permitirá al niño disfrutar mientras aprende.